Merezco tu nombre y sus silabas dibujando el mio,
tu sonrisa, el desprecio de los días que han pasado
en un parentisis infinito a ritmo de baladas.
Merezco tus terminantemente prohibidos
y mis musas adormecidas eternamente,
y merezco los silencios, y las sonrisas de reproches desvanecidos.
Merezco las mentiras, las piadosas y las crueles,
las que se inventaron un día que tal vez, habías muerto.
Merezco la ausencia y el despotismo,
las orugas de la muerte
y el festejo de la vida.
Merezco el norte perdido y el este desencantado,
las partituras desafinadas,
los ecos en la montaña
traspasando el horizonte.
El ladrido en la mañana
del perro que huye asustado.
Los terremotos del alma
de 9,4 grados.
Las escalas en cualquier aeropuerto.
Los trasiegos de tu calma.
Las luces, y las sombras, merezco.
Merezco el principio de una historia acabada.
Merezco la historia.
La historia...
Merezco.
3 comentarios:
Me gusta tu forma de escribir,los retazos estan genial.
Si mi hermana te comentara,pero ella aun no tiene blog,esta pensando en hacer unno pero no se decide.
Salud.
Un beso.
mereces un premio, eso es lo que mereces. por buena escritora.
Eso de los terremotos del alma de 9'4 grados me ha encantado!! qué cañera eres... el epicentro el corazón, ¿no?
Hola Pilar!!
Precioso...tienes una sensibilidad increible para escribir y me gusta tu estilo.
Un beso!
Inés
Publicar un comentario